martes, 5 de mayo de 2020

El emblema del Cuerpo Nacional de Policía

Nuestro buen amigo, colaborador y compañero de la Orden de la Placa y el Mérito, el Oficial Alberto Táboas Hermida, heraldista y vexilólogo, nos remite un informe que nosotros le solicitamos al respecto de las características heráldicas del actual emblema de la Policía Nacional.


Nos dice lo siguiente:

El actual emblema del Cuerpo Nacional de Policía tiene su origen en la Orden de 8 de febrero de 1988 por la que se establecen los distintivos, carné profesional, placa-emblema y divisas del Cuerpo Nacional de Policía. Concretamente en su Anexo IV se inserta un dibujo del mismo -el primero del que tengo constancia- y se hace una descripción pormenorizada de su diseño y sus variantes. 

Emblema de la Policía Nacional

Lo describe de la siguiente manera: Parte central con los cuatro cuarteles del Escudo Nacional y centro con las tres flores de lis, como base del conjunto de granada cerrada. Alrededor sobre fondo azul y en color oro la leyenda "CUERPO NACIONAL DE", y apoyada en la base "POLICIA", cargado en la parte exterior rayos cerrando el conjunto Sobre el conjunto y cortando la parte superior de los rayos, Corona Real de España, en color oro, constituida por un círculo engastado en piedras preciosas sumado de ocho florones de hojas de acanto de color oro (visibles cinco), interpoladas de perlas, de cuyas hojas salen otras tantas diademas, sumadas de perlas que convergen en un mundo con el ecuador y semimeridiano.



Sobre esto conviene hacer una serie de puntualizaciones:

1.- A pesar de cargar las armas nacionales, como bien indica la Orden se trata de un emblema, y no de un escudo, por no cumplir con las sencillas normas de la heráldica. La RAE define emblema como cosa que es representación simbólica de otra, y es un concepto ajeno a la propia heráldica, aunque pueda guardar algunas aparentes similitudes con ella.

2.- Este tipo de emblemas, y su derivación como placa emblema, es totalmente ajeno a la tradición uniformada del Cuerpo Nacional de Policía, encarnada por la Policía Nacional de 1978, la Policía Armada de 1941 o el Cuerpo de Seguridad de 1877. Ninguno de estos tres cuerpos usaron algo que se asemejase a nuestro actual emblema. No obstante, conviene recordar que el Cuerpo Nacional de Policía es también heredero de una tradición no uniformada, encarnada por el Cuerpo Superior de Policía de 1978, el Cuerpo General de Policía de 1941 o el Cuerpo de Vigilancia de 1877, y en ellos sí detectamos soluciones similares. Buenos ejemplos de todo ello son las placas-emblema de 1923, de 1942 y, especialmente, las de 1954, 1962 y 1982. Todas ellas responden a un mismo esquema de: escudo nacional + leyenda con el nombre de la corporación + rafagado.

Quizás lo más interesante del emblema del Cuerpo Nacional de Policía sea el diseño logotipado que del mismo hizo el insigne diseñador José María Cruz Novillo a finales de los años 80s, que aún hoy sigue vigente y se emplea profusamente tanto en la rotulación de vehículos policiales como en la intranet corporativa, como en la documentación interna del Cuerpo.

Alberto Táboas Hermida.


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