lunes, 24 de agosto de 2020

A propósito de una foto

Con relación a la entrada anterior que titulamos "Entierro de un Oficial de Cuerpo de Seguridad", nuestro buen amigo, colaborador y compañero de la Orden de la Placa y el Mérito, Carlos Fernández Barallobre, nos hace las siguientes puntualizaciones aclaratorias que publicamos y agradecemos.

El administrador del blog “Una historia de la Policía Nacional” ha incluido con fecha 23 de agosto de 2020, una fotografía que titula "el entierro de un oficial de Asalto".

Portada de La Vanguardia. El general Aranguren condecora al capitán Francisco Arrando, en presencia del hermano de este, el Comandante Alberto Arrando (La Vanguardia)

La instantánea realizada el 30 de julio de 1936, corresponde al entierro de los capitanes de la Guardia de Asalto Francisco Arrando Garrido y Antonio Arenas Llanderal. Francisco Arrando, era hermano del Comandante de la Guardia de Asalto Alberto Arrando, que se distinguió en los combates acaecidos en las calles de Barcelona, el 19 de julio, con motivo de la sublevación de varios regimientos en favor del Alzamiento Nacional y en contra de los gobiernos del Frente popular y de la Generalidad de Cataluña. Alrededor de la cinco de la madrugada tropas de diversos Regimientos de guarnición en la Ciudad Condal, comenzaron a salir a las calles con el objeto de tomar los lugares más emblemáticos y estratégicos de la ciudad (Palacio de la Generalidad, Gobierno Civil, Ayuntamiento, Correos, emisoras de radio …) .

Capitán Francisco Arrando Garrido

Un grupo de anarquistas y socialistas establecieron una barricada alrededor de la estatua de Colón en la Puerta de la Paz, para hostigar desde ella al edificio de la División Orgánica del Ejército. Una compañía del Regimiento de Zapadores del cuartel de Lepanto, recibió la orden de dirigirse hacia el edificio de la División, a través del paralelo barcelonés, para llegar a los cuarteles de Atarazanas. 

Al mismo tiempo, para enfrentarse a los artilleros, que custodiaban el acuartelamiento de la Maestranza de Artillería de las Atarazanas, desde la Barceloneta, se puso en marcha una compañía de la Guardia de Asalto al mando del capitán Francisco Arrando Garrido. Los de asalto llegaron hasta la estatua de Colon, pero fueron aniquilados por el fuego cruzado de Artilleros y Zapadores, que ya había tomado posiciones cerca del cuartel. En el intenso tiroteo caería muerto, al pie de la estatua del Descubridor, el capitán Francisco Arrando, que ingresó cadáver en el depósito judicial del Hospital Clínico de Barcelona, 

El Capitán de la tercera Compañía de Servicios Locales de Seguridad, Antonio Arenas LLanderal, moriría también, ese día, en las calles de Barcelona, enfrentándose a los militares.

Nota de prensa del entierro de los Capitanes de Asalto, Arrando y Arenas, publicada en el diario “ El Liberal de Murcia” el 1 de agosto de 1936 (El Liberal de Murcia)

El sepelio de ambos Capitanes fue multitudinario. Presidido por el Consejero José María España y el General Aranguren, así como numerosas autoridades del Gobierno Republicano de Cataluña, Fuerzas de Seguridad y Asalto, milicias y sindicatos de Barcelona, Guardia Civil, otros miembros de los diferentes partidos políticos, que componían en la ciudad Condal el Frente Popular y gran cantidad de barceloneses, que saludaron el paso de los capitanes con el puño en alto. 

El general Aranguren prendió en los féretros de los dos capitanes la medalla Militar. En el del capitán Arrando, acompañado por su hermano Alberto, jefe de las Fuerzas de Seguridad y Asalto de Barcelona. Las banderas ondearon a media asta. La comitiva fúnebre partió del cuartel nº 16 de los Guardias de Seguridad y Asalto de la Calle Maquinista, a hombros de sus propios compañeros quienes los depositaron sobre dos armones de artillería. 

Hace escasas fechas, concretamente el viernes catorce de agosto, en este blog se publicó una entrada titulada “General y Comandante”. Las fotografías pertenecían a los entierros de los Capitanes Arrando y Arenas. 

Carlos Fernández Barallobre.

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