viernes, 9 de agosto de 2019

¡Muy bien, chaval!

Hemos tenido acceso a una noticia que, aunque no guarda relación alguna con la razón de ser de este blog, si deseamos destacar.


Se trata de lo que le aconteció, en fechas pasadas, al joven piragüista sevillano Pablo Ogazón Rodríguez-Tabernero, quien tuvo la "osadía" de subir a recoger sendas medallas, ganadas en buena lid deportiva, en un pueblo de Zaragoza y en otro de Pontevedra, llevando sobre sus hombros la gloriosa Bandera de España.


Pues bien, en ambos casos, miembros de la organización de estas competiciones o de la Federación, le obligaron a retirarla, llegando a decirle en uno de los casos que no estaba permitido subir con ella y, en el otro, el mucho peor "quítatela que puedes molestar a alguien".

Resulta vergonzoso que unos individuos del corte de estos que impidieron a Pablo lucir nuestra Bandera Nacional, todavía puedan ostentar cargo en Federaciones, Clubes o en cualquier otro estamento español, sea público o privado.

¿Quienes son estos individuos para prohibir que alguien luzca la Bandera de España? Vergonzoso e indignante. 

La Bandera no puede ofender ni molestar a nadie y ya estamos hartos de que, por parte de toda esa caterva indeseable de independentistas, populistas, individuos de la extra izquierda, etc., traten de marcarnos las pautas de conducta al resto de los españoles. 

Los demás, tenemos que aguantar que ellos se enseñoreen de sus trapos de color rojo o con estrellas de cinco puntas o cualquier otros de los que usan; es, como dicen ellos, su libertad y ¿que pasa entonces con la nuestra, con la de los demás?

Muy bien Pablo, enhorabuena por tu coraje y valentía, aunque es bien triste que tengamos que felicitar a alguien por llevar sobre sus hombros la Bandera de España, la de todos los españoles.  

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