El honor es mi divisa

Aunque este gobierno de malvados incompetentes, de marxistas al estilo más bellaco, crea que se puede comprar a todos los españoles por un puestecito o una paguita, resulta que, gracias a Dios, está equivocado. España, los españoles viejos -no hablamos de concepto de edad, hablamos de raza, de recio espíritu-, somos gentes de honor, algo que hemos tenido a timbre de gloria y que tantas y tantas veces hemos demostrado a lo largo de la Historia y eso será, lo que a la postre, termine con estos canallas que nos gobiernan.

Ayer, en una medida arbitraria e injusta, ese tipo que ocupa el puesto de Ministro del Interior -prefiero no calificarlo de otra manera-, decidió relevar de su puesto al Coronel Diego Pérez de los Cobos, aun a sabiendas de que este prestigioso Guardia Civil cumplía escrupulosamente con su sagrado deber y daba cumplimiento a una orden recibida por la Autoridad judicial a la que, como miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, no podía negarse.

Teniente General Ceña (internet)

Sin embargo, nada de eso le importó a este perverso personaje que, en otro tiempo, fue, precisamente, Autoridad judicial y, con el fin de "salvar el culo" a todo ese miserable Partido político del que forma parte, culpable de todas las desgracias de España a lo largo de su historia reciente, se deshizo, por la vía rápida, de un prestigioso Guardia Civil que se limitó a cumplir fielmente con su deber.

Pues bien, con lo que no contaba el títere mentiroso de Sánchez, ni el "cherepas", ni ninguno de los de su calaña, era que hoy, un hombre con honor, el Teniente General Laurentino Ceña, Director Adjunto Operativo de la Guardia Civil (DAO), le presentase su dimisión irrevocable.

Estos canallas miserables social-comunistas que llevan a España a la ruina, a los que les da igual llevarse a quien sea por delante, mentir sin recato, engañar, hacer falsas promesas, por mantener sus sueldos y sus poltronas de forma permanente, creen que todos somos iguales que ellos y ahí es donde se equivocan. Afortunadamente, la mayoría somos bien nacidos y tenemos una cosa que ellos no conocen y que se llama HONOR.

Enhorabuena mi General por llevar hasta el último extremo el lema del Cuerpo, ese que dice "el honor es mi divisa" y que no solo se trata de una frase hecha, sino que es el timbre que glorifica a todos los que bajo él se amparan y por los que muchos han dado, generosamente, sus vidas.

Ojalá, que muchos más sigan su ejemplo. Ellos saben que a todos no los pueden cesar y ese es su miedo. Terror, diría yo. De ahí que ahora, en un ejercicio de cinismo absoluto, corran a querer comprar voluntades, prometiendo aumentos de sueldo y arreglo de cuarteles. A esta gentuza no se le puede creer, mienten como bellacos y así lo han demostrado desde siempre. Solo hay que recordar la Historia.

Al indigno individuo que ocupa el ministerio del Interior hay que exigirle que dimita, que se vaya ya de una vez. Vete Marlaska, vete ya y llévate contigo toda la podredumbre de ese gobierno maldito y canalla del que formas parte.  

Termino dirigiéndome al General Ceña. Sus subordinados, sin excepción, hoy seguro que se sienten orgullosos de tener un jefe como Vd. Ha sido leal con sus subordinados y ha dado toda una lección de honor y de hombría de bien que espero y deseo muchos otros imiten. 

En mi caso, como Policía que soy, solo me resta decirle, a la orden de vuecencia, mi General.

Eugenio Fernández Barallobre.