En esta fotografía, aparecida en el diario madrileño "Ahora", correspondiente al 12 de mayo de 1931, se observa a dos Guardias del Cuerpo de Seguridad, acompañando a dos de los heridos como resultado de los enfrentamientos habidos en la Puerta del Sol, donde algunos individuos dispararon sus armas de fuego contra el público.
En aquellas tristes jornadas, la barbarie de la izquierda se llevó por delante, tan solo en Madrid, nueve conventos o centros religiosos que fueron quemados por la chusma ante la pasividad del Gobierno de la República que, a instancias de Manuel Azaña, tardó dos días en reaccionar y sacar a las fuerzas del orden a la calle para evitar estos desmanes.
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| Heridos en Madrid (Ahora) |
Esta fiebre destructora se contagió a otras ciudades españolas, siendo la más afectada Málaga donde se quemaron un total de veintiún templos y se saquearon otros cuatro, quedando destruidas innumerables obras de arte, todas ellas irrecuperables como el conocido Cristo de la Buena Muerte.
En aquellas ciudades donde los Gobernadores tomaron rápidamente la decisión de frenar esta sed destructora, sacando las fuerzas a la calle, se evitó esta barbarie que, una vez más, demostró el desprecio de estos grupos radicales a la cultura y a las creencias de los demás.
En la foto, los Guardias de Seguridad aparecen con el uniforme de invierno del Reglamento de 1925 y en la chapa de los cascos se advierte que fue cortada la corona real.
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