El primero de julio de 1920, comenzaron a regir las nuevas tarifas para viajeros de los tranvías madrileños. Estas subidas generaron una serie de incidentes, con quema de tranvías, al negarse el público a aceptar estos incrementos de precios.
Como medida para garantizar el orden público, la Dirección General de Seguridad dispuso el despliegue en paradas y cabeceras de líneas de efectivos del Cuerpo de Seguridad, siendo el propio Director General, en unión de diferentes mandos policiales, quien recorrió todos los trayectos verificando la corrección del despliegue.
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| Detenido tras los incidentes (La Unión Ilustrada) |
Los incidentes más graves, que provocaron la práctica de varias detenciones, se registraron en los tranvías que circulaban con destino a la Fuentecilla, donde los usuarios, al ascender al vehículo, se negaron a hacer efectivas las nuevas tarifas lo que exigió de la intervención policial.
Los Guardias visten el uniforme estival declarado reglamentario en 1914.
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