La
muerte de este Cabo del Cuerpo de Seguridad de la plantilla de Barcelona, sobrevino
en el Hospital de la Santa Cruz en la tarde del 8 de febrero de 1923 donde se
hallaba ingresado desde el día 8 de enero anterior como consecuencia de una
lesión producida por arma de fuego en el transcurso de la celebración del “Día
de la lengua catalana”.
Tras
los actos celebrados, con tal motivo, en la Cascada del Parque, un grupo
compuesto por un centenar jóvenes se trasladó en manifestación por las calles
Princesa y Fernando hasta desembocar en las Ramblas donde fueron interceptados
por un Piquete de Seguridad al mando de un Oficial quien se dirigió a los
manifestantes, que portaban varias banderas, indicándoles que la manifestación
no estaba autorizada y que deberían proceder a plegar las banderas que
encabezaban la comitiva. Lejos de atender las indicaciones del Oficial
prosiguieron la marcha hasta la esquina de la calle Puertaferrisa donde,
nuevamente, el Oficial les conminó a que diesen por concluida la manifestación.
Como
quiera que de nuevo desatendieran las indicaciones del mando policial, éste
ordenó que se amagase una carga por la fuerza actuante. En ese instante desde
varios puntos abrieron fuego contra los efectivos policiales alcanzando uno de
los disparos al Cabo García Martínez.
Consecuencia
de estos sucesos, en el lugar de los hechos, fueron detenidos dos Concejales
barceloneses integrados dentro de la manifestación prohibida.
El
Cabo herido fue trasladado en primera instancia a la Casa de Socorro del
Distrito y más tarde al Hospital de la Santa Cruz donde fallecería un mes
después como consecuencia de la herida recibida.
El
Cabo García Martínez contaba 46 años de edad y estaba casado.
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