Nos hacemos eco de un artículo publicado en "Ok Diario", en el que da cuenta de la condena de cuatro años de cárcel impuesta, por la Audiencia Provincial de Cádiz, a un miserable individuo que agredió, por la espalda, con una tabla con clavos oxidados, a un miembro de la Policía Nacional, en octubre de 2019.
El colmo de la desvergüenza y de la ignominia es que los podemitas apoyen a este individuo, sin duda correligionario de ellos, aduciendo que "es injusto que esté en prisión".
A lo que se ve, para estos miserables, tan solo pueden ser reos de cárcel aquellos que se manifiestan con Banderas de España, a los acordes del Himno Nacional, delante de la casa de "moño sucio". ¡Indignante!
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