lunes, 14 de diciembre de 2020

Hoy, sigue presente

Hoy recordamos al Policía Nacional Luis Achurra Cianca, asesinado por ETA el día 14 de diciembre de 1990 en Amorebieta (Vizcaya). 

En la mañana del día 14 de diciembre, la banda terrorista ETA asesinaba en Amorebieta (Vizcaya) al Policía Nacional Luis Alfredo Achurra Cianca mediante una bomba-lapa colocada en su vehículo. 

Policía Luis Achurra Cianca


Los hechos sucedieron a las 12.50 horas de la mañana, en la calle San Pedro, de Amorebieta. El Policía Nacional Luis Achurra Cianca había acudido con su vehículo, un Peugeot Talbot modelo Samba, matrícula BI-4556-AC, de color verde, a un taller de automóviles. Luis Alfredo Achurra dejó su coche aparcado en la calle y penetró en el interior del taller para abonar una factura. Cumplido este trámite, que duró muy pocos minutos, salió de nuevo al exterior y se dirigió a su automóvil. Cuando, a solicitud de los empleados del taller, se disponía a mover el vehículo, que impedía la entrada y salida de coches, el artefacto, compuesto por dos kilos de amonal, estalló y le seccionó el cuerpo en dos. 

El Gobierno Civil de Vizcaya informó que la policía barajaba como hipótesis más probable la de que la bomba hubiese sido colocada bajo el coche de Luis Alfredo Achurra en la localidad de Basauri, donde tenía su residencia. El artefacto no habría hecho explosión al poner en marcha el vehículo en Basauri por algún fallo técnico y, sin embargo, se habría activado al arrancarlo por segunda vez, ya en Amorebieta. Posteriormente y tras investigaciones, la Policía informaría que la bomba que mató a Luis Achurra fue colocada en el interior de su vehículo —no en los bajos como se informó en los primeros momentos. 

Por deseo expreso de la familia, el funeral por el alma de Luis Achurra se celebró en la iglesia Nuestra Señora de la Paz, del barrio baracaldés de Cruces, en Vizcaya, al negarse a que se celebrarse, como estaba previsto, en la Iglesia de los Agustinos de Bilbao, próxima al Gobierno Civil. Al acto religioso, al que no se permitió la entrada a periodistas y fotógrafos, asistió el ministro del Interior, José Luis Corcuera; el director general de la Policía, José María Rodríguez Colorado; el delegado del Gobierno en el País Vasco, Juan Manuel Eguigaray; los gobernadores civiles de Vizcaya y Guipúzcoa, además de otras autoridades civiles y militares y numeroso público. 

El féretro, con los restos mortales del policía, envuelto en la Bandera Nacional, llegó al templo a las dos menos cuarto de la tarde y fue introducido a hombros por seis compañeros del Cuerpo. El funeral duró algo más de cuarenta y cinco minutos. Posteriormente el féretro fue trasladado al cementerio de Baracaldo, donde recibió cristiana sepultura. El ministro del Interior se negó a hacer declaraciones tras el acto y abandonó el lugar al término del mismo. 

Luis Alfredo Achurra Cianca tenía 37 años y dejaba huérfanos a tres hijos. Era natural de Bilbao y residía en Basauri. Se había incorporado al Cuerpo Nacional de Policía en 1981. Formaba parte de la Unidad Polivalente de Policía de Basauri que se dedicaba a tareas de vigilancia, entre ellas las de los presos ingresados en el Hospital de Basurto. Fue la última de las veinticinco víctimas mortales del año 1990. 

¡¡Dulce et decorum est pro patria mori!! 

1 comentario:

  1. Juan Carlos Iglesias Chouzas, alias Gadafi, y Francisco Javier Martínez Izaguirre fueron condenados a 35 y 27 años de prisión por este asesinato. No pudo ser juzgado Juan María Ormazabal Ibarguren, alias Turko, que falleció en un tiroteo con las fuerzas de seguridad en agosto de 1991.

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