El loco del Bernabéu (1976)

Nuestro buen amigo y colaborador, Carlos Fernández Barallobnre, nos remite estás imágenes que se corresponden al encuentro de ida de las semifinales de la Copa de Europa disputado el 31 de mayo de 1976 en el Estadio Santiago Bernabéu entre el Real Madrid y el Bayern Múnich. 

Con el marcador con empate a uno y casi al final del partido se produce un agarrón al delantero centro del Real Madrid Carlos Santillana en el área alemana. El árbitro del encuentro, el austriaco Enrich Linemayer, no pita absolutamente nada, ante la indignación general del público que llena las gradas del coliseo madrileño. 

Deteniendo al hincha

En ese momento salta al campo un exaltado que pasará a la historia con el nombre de "El Loco del Bernabéu", que llega hasta Linemayer evitando al jugador alemán Höness y le propina un tremendo puñetazo en la cara. Le agarran los jugadores del Bayern, le tiran al suelo, el guardameta Maier se ensaña con él. Llegan numerosos agentes de la Policía Armada, que forcejean con los jugadores alemanes y rescatan al exaltado aficionado llamado Jaime D.P de 26 años de edad, que puede escapar por los pasillos del estadio zafándose de las fuerzas del orden. 

Aspecto del terreno de juego en aquella jornada

El diario alemán Bild se cebó, de forma exagerada con España y con la Policía Armada, inventando agresiones de la policía a jugadores del Bayern Múnich, presentando el Estadio Bernabéu como una lugar de guerra salvaje, azuzando a sus lectores “contra los traidores Netzer y Breitner, que habían dejado sus clubes de origen en Alemania, que les habían dado todo, para unirse a esa tribu bárbara del Real Madrid”. 

Intervención de la Policía Armada

El Real Madrid caería eliminado al ser derrotado en Múnich en el encuentro de vuelta por dos tantos a cero. El estadio madrileño sería clausurado por dos partidos. Años después, concretamente veinticinco, "el loco del Bernabéu" declaró a la prensa que se sentía muy arrepentido. Aquel triste suceso obligo a los campos de fútbol de España a incorporar unas molestas vallas que afortunadamente desaparecieron en 2011 cuando fueron retiradas las ultimas que quedaban en el campo del Rayo Vallecano.