Sitio y defensa de Oviedo

Nuestro amigo y compañero Luis Mairata, nos remite este documentado comentario sobre el libro "Sitio y defensa de Oviedo", del que es autor Oscar Pérez Solís y fue editado en 1938.

En más de una ocasión se ha hablado en este Boletín del sitio y defensa de Oviedo, siendo seguramente el primer libro que se publicó al respecto el que bajo este nombre escribió el Capitán Oscar Pérez Solís, jefe de la 18ª Cia. de Asalto.

Un buen amigo mío, asturiano, sacerdote castrense amante de nuestra Patria, con orgullo de la patria chica, me lo recomendaba y comprometía el préstamo hace no mucho tiempo, pero la impaciencia hay a veces que nos puede cuando lo que se nos promete es tan goloso.

En una de mis búsquedas de nuevas piezas para la colección, se presentó ante mis ojos una primera edición del libro, impresa en marzo de 1937, y no pude resistirme a adquirirla.

El libro está escrito en plena Guerra Civil, impreso tan sólo 9 meses después de empezar la contienda y 6 meses después de finalizar el sitio, por lo que se puede imaginar que se escribió de forma rápida y, seguramente, con una intención “propagandística”, por un lado queriendo elogiar a los valientes asturianos, y por otro que el ejemplo sirviera de estímulo en la lucha que todavía se cobraría la vida de muchos españoles.

Quizá, yo esperaba una descripción más detallada de la participación de los de Asalto (10ª, 18ª, y 42ª compañías, que en ese momento contaban con 368 miembros), pero la sencillez de la guerra queda de manifiesto en los escritos de los participantes en las gestas guerreras de aquellos que, por oficio u obligación ante la historia, han procesado la religión de las armas.

Es un auténtico regalo el leer los hechos históricos en las fechas aproximadas de los hechos, pues ayuda a ponerse en el lugar de los protagonistas, y lamentablemente la situación actual se parece más de lo que debería a la de 1936.

El libro, que nos hace acompañar a los ovetenses en tan duro trance, se divide en dos partes, la primera y más extensa, la del Capitán Pérez Solís, que desarrolla los hechos históricos, así como sus antecedentes; y una segunda en la que el Capitán reproduce el diario de guerra de un falangista voluntario en la 18 compañía de los de Asalto, Manuel González Cabeza. La primera pone de manifiesto todo lo que rodea los hechos históricos, con una narración que deja de manifiesto el convencimiento que movía a los sublevados en su lucha, sin faltar el reproche a los tibios que no supieron o quisieron participar de la gesta. La segunda narra los hechos de forma breve y contundente, por ser las notas tomadas en los descansos por un soldado, como tantos otros lo hicieron.

Decía el Padre Martínez S.J, capellán legionario voluntario desde el mismo Alto del León, que cada vez que salía un reemplazo se acababan los cuadernillos en las papelerías. Seguramente una licencia exagerada puesto que el grado de alfabetización en España no era para ello, pero una muestra de cómo estos diarios de trinchera eran habituales, queriendo guardar un recuerdo más exacto de las líneas que esos soldados sabían que estaban escribiendo para la Historia. Líneas escritas con sangre generosamente derramada en la defensa de España.

En definitiva, un libro muy recomendable, con un alto valor histórico, no sólo por lo narrado, también por el lenguaje utilizado que expresa el entusiasmo del momento, la alegría del triunfo, y la fe en el futuro que mediante la fuerza de las armas y del espíritu se estaba (re)construyendo. Un testimonio de que en el bando nacional los de Asalto fueron tropas valoradas y queridas, utilizadas como fuerza de choque y combate.

Luis Mairata.