Muchas felicidades, Alteza

Hoy es un día especial en la vida de S.A.R., no solo porque ha cumplido la mayoría de edad, sino porque ha jurado a España defender la Constitución como norma fundamental del Estado.

Ya vimos las notables ausencias de esa colección de vagos y maleantes que, omitiendo el cumplimiento del deber, es decir, su trabajo por el que cobran, han dejado de asistir a la sesión de las Cortes Generales celebrada hoy, alegando que son republicanos. Una excusa que demuestra el colmo de la estupidez y las ganas de vivir de la sopa boba, a cuenta de todos nosotros.

De todas formas, este hecho, tiene una visión positiva para S.A.R., ya sabe con los que puede contar -aunque no con todos por mucho que estuvieran hoy en el Palacio de las Cortes- y con los que no. De momento, sabe quienes, sin ningún género de dudas, son sus enemigos que harán lo imposible porque no llegue a reinar, los otros, los del banco azul y sus correligionarios, ya veremos, aunque sospecho que, por ese afán que tienen de destruir a España, tampoco los puede considerar como amigos. Yo nunca les daría la espalda por si acaso.

En cualquier caso, S.A.R., muchas felicidades y tan solo cabe pedirle a Dios nuestro Señor, que le ayude a cumplir fielmente los juramentos -a la Bandera y a la Constitución- que ha empeñado.

Muchas felicidades, Señora.