Ir de "matute"

Esta expresión que forma parte del argot coloquial policial, en referencia a alguien que introduce una mercancía o se introduce él mismo de forma fraudulenta, puedo tener su origen, al menos en lo que a la Institución policial se refiere, en las huelgas estudiantiles del otoño de 1910 en Madrid.

Aquel mes de noviembre se produjeron una serie de altercados entre la Fuerza pública y estudiantes de la Facultad de Medicina de San Carlos. Consecuencia de ello, los estudiantes, concentrados en la calle, prorrumpían en silbidos y abucheos cada vez que eran alertados de la presencia de efectivos del Cuerpo de Seguridad, tanto contra los que se aproximasen a pie hacia ellos, como aquellos otros que transitaban en las plataformas de los tranvías con el fin de garantizar el normal desplazamiento del vehículo.

Guardias de Seguridad garantizando el orden en un tranvía de Madrid (mitad años 10)

Una de las acciones llevadas a cabo por los estudiantes, de manera especial en la jornada del jueves 24 de noviembre, consistió en detener todos los tranvías que circulaban por las inmediaciones de la Facultad con el fin de detectar la presencia de algún Guardia de Seguridad que viajase en su interior, puede que incluso de paisano, lo que los estudiantes denominaban de “matute”, esto es evitando revelar su presencia; una vez comprobaban que ningún Guardia viajaba en el vehículo le permitían seguir su ruta.

Parece ser que la expresión podría tener su origen en el apellido de un individuo del Cuerpo descubierto en tal actitud, lo cierto es que giro idiomático se generalizó en el ambiente universitario, llegando a servir para motejar a cualquier miembro del Cuerpo que fuese descubierto en tal actitud.

Posteriormente la expresión “ir de matute” se incorporó al argot policial donde todavía está en uso para describir, precisamente, la actitud de pasar desapercibido.

Como dato anecdótico, fruto de aquellos desórdenes sobrevino la dimisión del Jefe Superior de Policía de Madrid, Sr. Méndez Alanis.