Apoyamos, sin reserva, a nuestros compañeros que se están movilizando para llevar al tal Echenique ante la justicia por enaltecimiento de los disturbios callejeros.
Secundamos la opinión de los colectivos policiales que señalan que "Pablo Hasél no está en la cárcel por rapear. Ha entrado en la cárcel por enaltecimiento del terrorismo, con la agravante de reincidencia, por injurias y calumnias contra la Monarquía y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y por ensalzar a miembros de las bandas terroristas ETA y GRAPO”.
Sin embargo, no debemos olvidar cuando el actual Vicepresidente del Gobierno se emocionaba, según sus propias manifestaciones, al ver como una caterva de podemitas pateaba a un policía en la calle, cuando este se limitaba a cumplir con su deber.
Esperemos que, cuanto antes, el tal Echenique y otros de su misma calaña se sienten en el banquillo de los acusados por incitar a la rebelión callejera y secundar tales desmanes y que paguen los daños que sus mesnadas de perros fieles han ocasionado.
No debemos olvidar, por honor y por respeto a la memoria de nuestros compañeros vilmente asesinados por la ETA, el GRAPO y el FRAP, que a estos canallas terroristas son a los que enaltece el tal Hasél y todos los de su cuerda.
Esperemos que, de ahora en adelante, aquellos que se sientan policías o miembros de cualquier otro Cuerpo de Seguridad y tenga la dignidad que corresponde, sepan, cara a citas electorales futuras, quien es el enemigo a batir.
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