Los Angeles de la Guarda

Dice el Salmo "mandará a sus Angeles a que te guarden en los caminos". Una frase que tantas y tantas veces hemos escuchado y se ha hecho realidad.

En ninguna parte habla de que los Angeles tan solo puedan ser criaturas celestiales. Los caminos de Dios son inescrutables y, en ocasiones, se vale de los hombres para hacer cumplir sus designios.

Mandará a sus Angeles para que te guarden en los caminos (Salmo)

Ese es el caso que sucede cada vez que alguno de nosotros salvamos in extremis a un ser humano. Sin duda estábamos allí para cumplir esos designios.

Nuestra historia corporativa está llena de hechos heroicos que, en ocasiones pasan casi inadvertidos y que constituyen el día a día de nuestro trabajo más allá de hacer cumplir la Ley.

Todavía hoy, hemos sabido que una dotación policial salvó la vida a un bebé de dos meses que se encontraba en parada cardiorespiratoria; algo similar sucedió el pasado 10 de enero en la Terminal 4 de Barajas cuando, Policías Nacionales, evitaron que un niño pereciese asfixiado. Otro caso similar se dio el pasado 16 de diciembre y así, tantas y tantas veces.

Unas veces evitando atropellos, otras rescatando de una riada o de un incendio a una persona y en muchos casos aun a costa de la vida del Policía.

Dice el Salmo, "mandará a sus Angeles para que te guarden en sus caminos" y así nos hemos convertido en el vivo reflejo de nuestro Santo Patrón.