Aunque no nos sorprende pues conocemos bien la indignidad de esta gente, nos parece una ofensa la negativa del representante del Estado en la Comunidad Autónoma vasca, Urkullu, a que la U.M.E. (Unidad Militar de Emergencias), preste su apoyo en el rescate de los dos operarios sepultados en Zaldibar, cuando cualquier ayuda para tratar de encontrar a estas dos personas debería ser bienvenida si quien recibe la oferta fuese un hombre de bien.
Parece que este individuo, cegado por sus sentimientos independentistas, parece olvidar aquel agosto de 1983, en que Bilbao quedó anegado por las aguas, sufriendo grandiosos daños, además de la pérdida de vidas humanas.
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| El Ejército en Bilbao en 1983 (internet) |
Por aquellos años estábamos destinados en la Comisaría del Distrito de Santiago de la capital vizcaína y recordamos el trabajo realizado, durante días, tanto por la Policía como por el Ejército para restablecer la situación y tratar de ayudar a las víctimas, paliando en lo posible los daños causados por la subida de la ría.
El casco Viejo bilbaíno, donde se encontraba ubicada la Comisaría, que quedó totalmente destruida,fue sellado por efectivos de las Unidades de Reserva General de la Policía Nacional para evitar, entre otras cosas, el pillaje. Se auxilió a las víctimas y no se descansó hasta normalizar la situación.
Los vehículos policiales prestaron apoyo en el traslado y protección de los auxilios que fueron llegando de toda España y el Ejército se empleó a fondo para ayudar en todo lo que fuese necesario, tendiendo puentes, transportando agua y medicamentos.
Allí estuvimos policías y militares, hombro con hombro con el pueblo de Bilbao en aquella grave situación.
Ahora, sin embargo, este individuo y sus correligionarios, desprecian la ayuda de la UME, ofendiendo con ello no solo al Ejército Español, que jamás regateó esfuerzos a la hora de auxiliar a la población civil, sino también a todos los españoles.
¡En manos de quienes estamos!
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