El 13 de abril de 1913, España estuvo a punto de vestirse de luto, cuando un anarquista, Rafael Sancho Alegre, atentó contra el Rey D. Alfonso XIII.
Aquel domingo, era día de fiesta en Madrid como en otras muchas ciudades españolas, al celebrarse el acto anual de Jura de Bandera de los nuevos Soldados de aquella quinta, un acto multitudinario que llenaba las calles y plazas de las localidades donde se celebraba tan emotivo y patriótico acto.
Al regresar de la Jura, transitando la Comitiva Real por la calle de Alcalá, con S.M. el Rey montado sobre el airoso caballo "Alarún", un individuo salió de entre la multitud y realizó dos disparos sobre la persona del Rey que no llegaron a alcanzarle.
Con prontitud, el Teniente del Cuerpo de Esteban Mohíno Toribio, los Guardias del mismo Cuerpo Vicente Canaleda y Gumersindo Núñez, así como el Agente de Vigilancia Rafael Guijarro, se abalanzaron sobre el agresor logrando neutralizarlo, pese a no poder impedir que efectuase un tercer disparo con su revólver "Puppy-Velodog" que alcanzó, en un muslo, al Agente del Cuerpo de Vigilancia citado.
Una vez detenido el autor del frustrado atentado, fue identificado como Rafael Sancho Alegre, un barcelonés, de veintiséis años, de filiación anarquista, de profesión carpintero,e filiación anarquista, que llevaba como dos meses en la Capital de España, trabajando en su oficio y se hallaba alojado en una pensión del nº 7, de la calle General Pardiñas.
De estatura mediana, complexión ágil y fuerte y cabello rubio, este individuo aseguró que el motivo de su presencia en Madrid era, precisamente, atentar con el Rey el día de la Jura de Bandera, salvo que se le presentase una oportunidad anterior.
En su declaración, manifestó que el arma, un revólver de pequeño calibre, lo había adquirido por 15 pts., en una casa de la calle de Atocha. También señaló que, con anterioridad, había sido expulsado de Francia.
Igualmente, se pudo saber que el anarquista estaba siendo vigilado por la Policía ya que, personal del Cuerpo de Vigilancia, habían visitado a la patrona de la casa donde vivía para interesarse por él.
Juzgado y condenado a muerte, el Rey le conmutó la pena por la de cadena perpetua.
Una vez detenido el autor del frustrado atentado, fue identificado como Rafael Sancho Alegre, un barcelonés, de veintiséis años, de filiación anarquista, de profesión carpintero,e filiación anarquista, que llevaba como dos meses en la Capital de España, trabajando en su oficio y se hallaba alojado en una pensión del nº 7, de la calle General Pardiñas.
De estatura mediana, complexión ágil y fuerte y cabello rubio, este individuo aseguró que el motivo de su presencia en Madrid era, precisamente, atentar con el Rey el día de la Jura de Bandera, salvo que se le presentase una oportunidad anterior.
En su declaración, manifestó que el arma, un revólver de pequeño calibre, lo había adquirido por 15 pts., en una casa de la calle de Atocha. También señaló que, con anterioridad, había sido expulsado de Francia.
Igualmente, se pudo saber que el anarquista estaba siendo vigilado por la Policía ya que, personal del Cuerpo de Vigilancia, habían visitado a la patrona de la casa donde vivía para interesarse por él.
Juzgado y condenado a muerte, el Rey le conmutó la pena por la de cadena perpetua.
https://freeditorial.com/es/books/el-anarquista-loco-que-quiso-matar-a-un-rey
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